viernes, 24 de julio de 2009

"EL FIN DE LA HISTORIA"

“Y volver, volver, volver
a tus brazos otra vez.
Llegaré hasta donde estés.
Yo sé perder.
Yo sé perder.
Quiero volver, volver, volver”.

José Alfredo Jiménez, “Volver”


Como en el “Don Pirulero”, mientras el reclamado diálogo se pone de moda, cada sector atiende su juego y tira del mantel, demostrando que le importa “tres belines” si los demás pudieron probar un bocado o no.
En la vida doméstica, eso implicaría una demostración de muy mala educación; pero, “a la derecha de su pantalla, señora”, es todo lo contrario.
“El campo” quiere no pagar nada y que le den subsidios. Los industriales quieren devaluación, congelamiento de salarios y flexibilización laboral. Los bancos no quieren largar un mango y quieren que nos endeudemos con el FMI, para manejar ellos esos “morlacos”. Las cámaras de comercio no quieren saber nada de control de precios, y poder remarcar “a lo pavote”.
Todos quieren “La chancha y los veinte”, y no quieren escuchar que les pregunten cómo hacen los demás si el gobierno les llega a dar bolilla.
Claro. Siempre y cuando los que les ponen los micrófonos se animen a preguntarles y no se limiten a “darles el pie”.
Mientras tanto, la oposición habla de “cosmética” en el INDEC y, de golpe, se pusieron de moda “los gordos”.
Es que “entre bueyes no hay corneadas”, y para el “periodismo (de) Independiente”, siempre y cuando se hable mal de los Kirchner, todos nacimos ayer y nadie tiene historia.
El Luis Barrionuevo que estuvo el lunes pasado en lo de Morales Solá, no debe ser el mismo que hace veinte años dijo “tenemos que dejar de robar por dos años”; o el que, en el 2003, mandó quemar las urnas, en Catamarca, delante de las mismas cámaras que ahora lo convierten en una suerte de estadista.
Tampoco Lescano, Rodríguez, Martínez y Cavallieri deben ser los mismos que iban a lo de Neustadt, y no decían nada de la flexibilización laboral, en los años noventa.
Mucho menos el Mauricio Macri que imita a Freddy Mercury, puede ser el mismo que firmó el decreto en el que se obliga a las empresas de la ciudad de Buenos Aires que informen sobre los antecedentes en adicciones de sus empleados. Tampoco el que insiste con nombrar como fundador de la Policía Metropolitana a un acusado de encubrimiento en el atentado a la AMIA y en el secuestro de Axel Blumberg.
No. Debemos estar todos muy confundidos y equivocados. No puede ser. Parecen todos tan agradables.
Pero no nos pongamos quisquillosos. Así como Felipe Solá, Martín Lousteau, Santiago Montoya y Alberto Fernández fueron monstruos hasta hace muy poco tiempo; y hoy son poco menos que “oráculos”; ya le llegará el turno a Guillermo Moreno para sentarse a las mesas de “A dos voces”, o de Mirta Legrand.
Después de todo, si el dinero de la pauta publicitaria gubernamental hubiera ido a parar a ciertos medios de comunicación, no tendríamos la menor idea de quien es Moreno.
Que lo diga, sino, Alejandro Apo, a quien despidieron de Radio Continental por desacuerdos económicos, y no hubo, en ese despido, ningún ataque a la libertad de prensa, como en resonantes casos anteriores.
“A papá gorila con bananas verdes”.
Claro que no es que este gobierno sea una maravilla, ni tan revolucionario como lo quisieran ver unos y otros; sino que los que tiene “enfrente” no son, precisamente, Dantón y Robespier. Tampoco la Madre Teresa; sino todo lo contrario.
No es ningún descubrimiento. Ya se lo había dicho Perón a la RAI, hace casi cuarenta años: “No es que nosotros hayamos sido buenos; sino que los que vinieron después fueron peores”.
Pero, como nacimos ayer y no tenemos historia; paradójicamente, parece que no nos queda más remedio que repetirla.
La eterna adolescencia tiene estas cosas.

Buenos Aires, 24 de julio de 2009

lunes, 20 de julio de 2009

"¿EN QUÉ QUEDAMOS?"

“Los seres humanos operamos siempre desde una coherencia, donde estos tres dominios están íntimamente relacionados. El lenguaje constituye nuestra realidad a través de los juicios, opiniones y declaraciones que emitimos. Las emociones (palabra de raíz latina que etimológicamente significa "en movimiento") son el motor de nuestras acciones. El cuerpo es el espacio físico en el cual nuestro lenguaje y nuestras emociones se manifiestan en el mundo. Nancy Diana define a esta coherencia como el "ser integral" habilitando canales de autenticidad y plenitud en el desarrollo de habilidades..”

http://es.wikipedia.org/wiki/coherencia


Una frase muy vieja dice que “ningún político resiste un archivo”(como si el resto de los seres humanos que no nos dedicamos a la política pudiéramos resistirlo en nuestras vidas cotidianas y anónimas).
Obviamente, la frase es de una época en la que “armar un archivo” requería de paciencia y constancia. Por lo tanto; “pescar” a un dirigente “en un renuncio” era sinónimo de una minuciosidad y una obstinación casi maniática.
Claro; en la época en que se acuñó la frase los políticos tardaban años en proclamar “nunca lo hice, ni lo volveré a hacer”.
Hoy, Internet sirve para muchas cosas. Entre ellas, para ver los diarios de hace un tiempo y comprobar que “no todo lo que reluce es oro”; sino que, además, puede ser todo lo contrario.
Así, si entramos a la página del diario La Nación del 23 de noviembre de 2008, podremos encontrarnos con una nota titulada “Lo peor: la relación con el gobierno nacional”(http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1073280), que comienza diciendo que “Macri se siente agobiado por la falta de diálogo con el gobierno nacional”.
Pero, si hacemos lo mismo con la edición del mismo diario del 18 de julio de 2009, nos encontramos que el socio de Macri se opone al diálogo con el gobierno nacional. Tal vez porque no está tan “agobiado” como el Jefe de Gobierno porteño.
La nota se titula “De Narváez anticipó que no va a participar de un ´monólogo´ en su visita a la Casa Rosada” (http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1152012) y en su “bajada” se puede leer que "´el Gobierno trata de tirar bombas de humo sobre los graves problemas que tenemos´, indicó el diputado de Unión-PRO Francisco de Narváez, que remarcó que no irá sólo a escuchar al ministro Randazzo en la ronda de diálogo del próximo miércoles
¿Cuánto tiempo estuvimos escuchando la cantinela de la “falta de diálogo”? ¿En qué quedamos?
Bastó que el poder ejecutivo convocara a los partidos políticos para que “las gatas Floras” despuntaran su histeria de quinceañeras en la puerta de un liceo.
Que todos juntos, que todos juntos no, que los hombres de oscuro y las damas de largo, que así no, que de elegante sport, que a nosotros en privado, que a los otros después, que solos, que acompañados de sus padres.
¿Querían o no querían el diálogo?
Algo parecido ocurre con la denominada “Reforma Política”.
Si nos tomamos el trabajito de entrar al diario Clarín del 27 de febrero de 2009(http://www.clarin.com/diario/2009/02/27/elpais/p-01866960.htm) nos encontraremos con un titular que dice “La boleta única llegó a la justicia”, y en el cuerpo de la nota podremos leer “dirigentes y legisladores de la oposición presentaron ayer en la Justicia Electoral el proyecto de boleta única que, sostienen, debe regir las elecciones de octubre”, y que “La propuesta es fruto del trabajo en conjunto iniciado en abril del año pasado, entre la UCR, la Coalición Cívica, el Partido Socialista, el PRO, el MIJD, el Partido Nuevo de Córdoba y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), reunidos en el Foro para la Reforma Política que coordina Gerardo Conte Grand”.
Claro; era febrero y todavía las elecciones no se habían adelantado para junio. Quizás, por eso ninguno de los integrantes del citado foro volvió a “hacer ruido” con el tema. Prefirieron instalar el fantasma del fraude.
Otro, se declaró víctima de “la vieja política”. La misma “vieja política” en la que eligió apoyarse.
Ahora, cuando faltan más de dos años para las próximas elecciones, es el momento ideal para discutir esas iniciativas.
Pero, si entramos a la página del mismo diario del 14 de julio del mismo año(http://www.clarin.com/diario/2009/07/14/um/m-01958104.htm) leeremos un titular que dice “Reforma política: la oposición mantiene sus reparos a la convocatoria oficial”; y en el texto, podemos encontrar que “El titular de la bancada PRO en Diputados, Federico Pinedo, se pronunció en un sentido parecido. ´La convocatoria de la presidenta (Cristina Fernández) fue amplia y nos pareció positiva. Después cuando el ministro del Interior (Florencio Randazzo) dijo que solamente van a hablar de cómo se eligen los candidatos, nos parece una ofensa´, expresó en declaraciones a varias radios”.
¿En qué quedamos? ¿Importa o no importa cómo se eligen los candidatos? ¿O solo es importante para salir en los diarios antes de las elecciones? ¿O una vez que fuimos elegidos ya no importa cómo se eligen los candidatos?
Pero no todo lo que busquemos por Internet puede encontrarse tan fácilmente como estas contradicciones de los representantes que supimos elegir.
Para Clarín y La Nación, no existe la polémica por “el fino” Palacios. Sólo Moreno, Moreno y nada más que Moreno.
Es coherente con nuestra amnesia.
No existieron golpes de Estado, no existieron los noventa, nunca ocurrió el 2001.
La adolescencia es así.
¡Gente grande, viejo!

Buenos Aires, 19 de julio de 2009

viernes, 10 de julio de 2009

"CREER Y REVENTAR"

“La realidad duerme sola en un entierro
y camina triste
por el sueño del más bueno.
La realidad baila sola en la mentira,
y en un bolsillo tiene
amor y alegría,
un Dios de fantasía,
la guerra y la poesía”

León Gieco, “La colina de la vida”


Si el gobierno nacional tendría que haber postergado las elecciones; ¿por qué ningún gobernador o intendente declaró su correspondiente “emergencia sanitaria”, haciendo uso de “su autonomía”, antes del 28 de junio?
¿Acaso para que la medida no jugara “en contra” de éstos, incluido el de la Ciudad de Buenos Aires?
Con el diario del lunes bajo el brazo, también es fácil opinar que la jugada anterior al gol de Vélez fue un foul grande como una casa.
Pero; ¿no se estará tomando políticamente el fenómeno de la gripe porcina?
¡No!. La política es mala, ¡caca!, ¡pumba!.
Como sea, el asueto o no del viernes nos da y no nos da la respuesta.
Ni una pandemia mundial puede evitar que nos rajemos a la mierda un fin de semana largo, aunque tengamos que aguantarnos 14 kilómetros de cola, en la Panamericana.
Eso sí; bien munidos de barbijos y de blixters de Timaflú, por las dudas, comprados en el “mercado negro”, o traídos de Uruguay, porque en las farmacias no se consigue.
¿Por qué el laboratorio Roche no distribuye el famoso antiviral? ¿Estará especulando con un posible “pico” de casos, para que redunde en un aumento en el precio?
-“No; porque un aumento en el precio sólo se puede realizar con la autorización de la Secretaría de Comercio Interior”-, respondería un vocero del laboratorio, si es que a algún periodista se le ocurriera realizar la pregunta ya dicha.
¿Y quién está al frente de dicha secretaría?
¡Qué casualidad!
Guillermo Moreno; el mismo funcionario a quien el clamor mediático señala como culpable del forúnculo que no nos deja dormir, del juanete que nos deforma los zapatos y de que la minita que nos gusta no nos de bola.
¡Y dale con Pernía! ¡Y dale con Pernía!, -diría Mario Sapag.
Claro que como Guillermo Moreno es un incordio para Magdalena Ruiz Guiñazú, Joaquín Morales Solá, Eduardo Van Der Kooy, Ernesto Tenembaum y compañía(¿o “CÍA”?), ningún cambio de gabinete puede ser suficiente; y siguen con el “dale que te dale”.
Pero, a éstos, parece no molestarles de la misma manera la designación del ex comisario Jorge “el fino” Palacios, al frente de la futura Policía Metropolitana.
Es que la pauta publicitaria del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires es abundante; y “con la plata no se juega”.
Y, por la plata, uno es capaz hasta de bancarse a un acusado de entorpecer la investigación por la voladura de la sede de la AMIA, que se cobró más de ochenta víctimas, de participar en la represión del 19 y 20 de diciembre de 2001, y de intervenir en el procedimiento que terminó con la vida del secuestrado Axel Blumberg.
Estaría bueno que alguno de los periodistas “independientes” antes mencionados le preguntara a Juan Carlos Blumberg qué opina de tal designación.
También estaría bueno que Marcos Aguinis, Santiago Kovadlof y el periodista y diputado “republicano” Fernando Iglesias publicaran su parecer al respecto en las innumerables páginas que el periodismo (de) independiente les ofrece cada semana, en donde se la pasan dando cátedra de “republicanismo”.
Igualmente de bueno estaría que el gobierno nacional, en vez de repartir recomendaciones sobre la gripe A, modificara las tradicionales ceremonias de jura de los nuevos ministros y secretarios de Estado.
No se debería recomendar la no asistencia a lugares multitudinarios, e invitar a cientos de personas a “apiñarse” en el Salón Dorado de la Casa Rosada, y a repartir besos y abrazos como si “afuera” no existiera ninguna emergencia sanitaria.
También, estaría bueno que el recientemente reelecto diputado Francisco De Narváez fuera un poquito más preciso en sus apreciaciones.
Según la periodista de La Nación Lucrecia Bullrich, el autodenominado “hombre común” expresó que “Se tienen que ir Kirchner y Moreno”.
Sobre Moreno ya hemos hablado.
Néstor Kirchner, según el diputado Francisco De Narváez ¿de dónde se tendría que ir? Desde el 10 de diciembre de 2007, ya no es más Presidente de la Nación. Desde el 29 de junio de 2009, ya no es más Presidente del Partido Justicialista. ¿Qué pide De Narváez? ¿Qué se divorcie?
Con el mismo criterio, podríamos pedirle a la senadora María Eugenia Estensoro que renuncie a su vínculo de esposa de Haroldo Grisanti, ex liquidador del Correo y colaborador de Domingo Felipe Cavallo, durante el gobierno de Menem.
Por lo visto, quienes suelen abusar del llamado “jarabe de pico” alguna responsabilidad parecen tener en lo que nos pasó y lo que nos pasa; ¿no?
Tampoco nadie se toma el trabajo de preguntárselo.
¿Por qué?
Porque “por la plata baila el mono”.
¿O “el gorila”?
Lo cierto es que Huracán no salió campeón. Perdió “el fútbol que le gusta a la gente”, el “juego bonito”, y hasta en el fútbol parece que ganó la derecha.

Buenos Aires, 10 de julio de 2009

viernes, 3 de julio de 2009

"O QUÉ SERÁ"

“Se dispersan el día y la batalla deforme.
Vencen los bárbaros,
los gauchos vencen”

Jorge Luis Borges, “Poema conjetural”


Los triunfos son triunfos y las derrotas son derrotas; por “un pelito” o “por afano”. Valga la redundancia; “pelito pa´la vieja” y “a llorar al campito”.
“La única verdad es la realidad”, dijo alguien, hace mucho; y otro alguien se lo copió, hizo famosa la frase y no le faltó razón por eso.
Si Rensenbrik hubiera metido adentro el tiro que pegó en el palo, en el minuto noventa de la final del 78, otro hubiera sido el desenlace del fútbol argentino y de la dictadura militar; y hasta nos hubiéramos privado de la guerra de Malvinas, y Julio Grondona seguiría atendiendo la ferretería de Sarandí; o no.
Pero, la pelota pegó en el palo, se estrelló contra un cartel de publicidad y terminó el partido. Vino el alargue, los goles de Kempes y Bertoni, y el que no saltaba era un holandés.
Lo mismo se podría decir si a Maradona le hubieran cobrado “la mano de Dios”, y le hubieran sacado la tarjeta amarilla. Pero el único que no vio la infracción fue el árbitro, y después vino aquella maravilla del “barrilete cósmico” y “esta barra quilombera no te deja de alentar”.
Si mi abuela hubiera tenido testículos en vez de tetas, sería mi abuelo; pero no fue así.
Si el domingo pasado, los que perdieron hubieran ganado; qué duda cabe que los perdedores le habrían puesto música de cacerolas al “cuentito del fraude”, y habrían minimizado la derrota diciendo que el 30% no fue a votar.
Si los que ganaron hubieran perdido; ¿los ganadores se habrían quedado con los ahorros, los medios de comunicación y la propiedad privada, dejando “al fantasma Chávez” hecho “un poroto”?
Por suerte(o porque ganaron los que ganaron) no hubo fraude, el gobierno fue el que “minimizó” el resultado de la elección(¿cómo no asociar al Perico de Menem con El Calafate de Cristina?) y, salvo para el diario “El argentino”, a nadie le importó el 30% de abstención.
Lo cierto es que la del domingo pasado fue una elección de renovación legislativa; y en estas cuitas gana el que logra aumentar sus bancas y pierde el que se queda con menos.
Si bien Unión-Pro duplicó el número de diputados que tenía, el que hizo el gran negocio fue el Acuerdo Cívico y Social, que se consolidó como segunda minoría tanto en la cámara baja como en la alta, bien lejos de las huestes de Mauricio, que quedaron terceros, sin conocer aún lo que es sentarse en una banca del senado.
Pero, a pesar de que “la única verdad es la realidad”, para “los que la miran por tevé”, los verdaderos ganadores fueron “los Franciscos”, “los Mauricios”, “las Gabys”, “los Loles” y “los Felipes”, sin discriminar entre los verdaderos y las caricaturas de “Gran cuñado”.
Eso si. Todos bien “a la derecha de su pantalla, señora”.
Así, después de haber votado, “Doña Rosa” sigue tan confundida como en las épocas en que había un programa auspiciado por “las empresas a las que les interesa el país”.
Convencida de que con los gobiernos democráticos se hace lo mismo que con los directores técnicos, -al igual que Mirta Legrand-, no puede entender por qué tiene que esperar dos años más para terminar con “el zurdaje”, y ninguna renuncia la conforma.
Es más; está convencida que la epidemia de Influenza A1H1 es una venganza del kirchnerismo contra quienes no lo votaron. Por eso no deja de sospechar y repetir que la falta de barbijos y de alcohol en gel es una maniobra de Guillermo Moreno, en complicidad con Luis D´Elía y financiada por el chavismo, para que se enferme Rodríguez Larreta.
Tanto va la victimización a la fuente que cobrarle el IVA a un diario es un ataque a la libertad de prensa.
Lo cierto(¿lo cierto?) es que cada uno de “los elegidos” tendrá que poner sobre su banca “sus verdaderas intenciones”, más allá del marketing electoral y de su capacidad para “enganchar giles”. Servir a la Nación, a la República, a la Democracia y al bien común no es lo mismo que ir o no ir a “Gran cuñado”, o decir “Alika” “Alikate”. Tendrán que ponerle “contenido” a las cuidadas formalidades estéticas de campaña, si es que detrás de su minimalismo y los buenos modales hay algo más.
Los prestigiosos consultores internacionales ayudan a ganar elecciones; no a legislar, ni a gobernar.
Al oficialismo le toca poner las barbas en remojo. “Lo que viene” viene porque se lo dejó venir, y varios sayos lo esperan en el placard.
Un congreso “multicolor” requiere de mucha capacidad de negociación, para obtener consensos puntuales, que no serán los mismos en una ocasión que en otra. Como ya se dijo en este espacio, tendrá que convencer a “los que están cerca”, y evaluar la eficacia concreta de la defensa que dicen ejercer ciertos adalides, cuyos favores cuesta reconocer a simple vista.
Por lo visto, hay “matrimonios para toda la vida” que no llegan a “la comezón del séptimo año”.
De aquí en más, veremos quienes tienen una verdadera intención de responsabilidad institucional y política, y quienes sólo aspiran a “seguir estando en la tele”, como una simple voz o imagen “testimonial”, tanto a la derecha como a la izquierda de su pantalla, señora.

Buenos Aires, 3 de julio de 2009